1. Nos aporta longevidad.

Además del delicioso sabor que aporta a nuestros platos el aceite de oliva virgen extra posee un gran poder para prevenir numerosas enfermedades, numerosos estudios científicos de los centros de investigación más prestigiosos certifican que las personas que consumen de forma habitual aceite de oliva virgen extra son más longevas que aquellas que consumen otros tipos de aceites vegetales poliinsaturados como el aceite de girasol. Además el aceite de oliva gracias a su enorme poder antioxidante (anti-cancerígeno) posee un valor añadido para luchar contra el envejecimiento celular (efecto de los radicales libres) y prevenir ciertos tipos de cáncer (como veremos más abajo).

2. Posee un potente poder anti-bacteriano. 

El aceite de oliva virgen extra posee un gran poder anti-bacteriano que ayuda a prevenir todo tipo de infecciones provocadas por bacterias en el interior de nuestro organismo, pero es especialmente eficaz en la lucha contra la conocida bacteria llamada Helicobacter Pylori: una bacteria que puede causar numerosos problemas en el sistema digestivo, entre otros: todo tipo de úlceras e incluso cáncer de estómago en los casos más graves. Pues bien, según un prestigioso estudio científico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC): 30 gramos de aceite de oliva virgen extra diario durante 15 días ha demostrado ser capaz de eliminar esta bacteria en 8 de las cepas que existen (en un porcentaje elevado), 3 de las cuales son incluso resistentes a los anti-bióticos prescritos por los médicos.

3. Es beneficioso para nuestro sistema digestivo e intestinal. 

Como ya hemos adelantado según el punto anterior el aceite de oliva virgen extra gracias a su poder anti-bacteriano es especialmente beneficioso para nuestra salud digestiva. No obstante, además de lo anterior también es importante destacar la gran labor del aceite de oliva aminorando el excedente de ácidos gástricos que puede provocar úlceras de todo tipo por lo que comunmente se conoce como “reflujo”. Además el aceite de oliva virgen extra favorece la absorción de minerales como el calcio y el magnesio lo que aumenta el PH de nuestro organismo.

4. Nos ayuda a prevenir enfermedades inflamatorias como la artritis. 

El AOVE (aceite de oliva virgen extra) es un aliado de nuestro organismo para luchar contra la inflamación (provocada por la oxidación que provocan los radicales libres), especialmente en determinadas enfermedades y dolencias en las articulaciones como podría ser la inflamación provocada por la artritis reumatoide que tradicionalmente se considera que está asociada a deficiencias en el sistema inmunológico (los anti-cuerpos atacan a las células sanas, cuando deberían protegerlas de agentes externos). Este efecto beneficioso del aceite de oliva se multiplica cuando a su vez se mezcla con la ingesta de ácidos grasos omega 3 (que se encuentra en gran cantidad en el pescado azul).

5. Mantiene la salud de nuestras funciones cognitivas.

El aceite de oliva virgen extra (AOVE) posee unos compuestos antioxidantes muy saludables llamados polifenoles que actúan también activamente en otros beneficios de esta lista, pero que según estudios científicos de rigor se ha demostrado que podrían poseer un papel fundamental en la neuro-génesis, es decir, pueden ayudar al nacimiento y desarrollo de nuevas neuronas así como membranas y tejidos celulares, de hecho estos estudios además han demostrado que las personas que consumen habitualmente aceite de oliva virgen extra (ácidos grasos monoinsaturados) poseen mejores funciones cerebrales, cognitivas, metabólicas y mejor memoria.

6. Ayuda contra la diabetes de tipo II. 

El aceite de oliva virgen extra posee un beneficioso efecto en el sistema regulador del índice glucémico de nuestro organismo y la consecuente liberación de insulina. Son buenas noticias en un momento en el que hay un gran porcentaje de la población afectada por esta enfermedad y parece ser que el problema va en aumento. Numerosos estudios científicos han demostrado que las personas que consumen habitualmente AOVE o aceite de oliva virgen extra poseen menos incidencia de casos de diabetes de tipo II.

7. Beneficioso para la salud de nuestra piel. 

Como ya sabemos el AOVE o aceite de oliva virgen extra posee un gran poder antioxidante que actúa entre otros efectos como un verdadero anti-edad en nuestra piel, posee determinados componentes nutritivos que combaten afecciones de la misma. Además también posee numerosos efectos beneficiosos para la salud de nuestros huesos previniendo afecciones como la osteoporosis.

8. Anti-cancerígeno natural.

Como ya sabemos el aceite de oliva virgen extra posee un gran poder antioxidante que nos protege contra los efectos de los radicales libres en nuestro cuerpo que provocan la inflamación y en muchos casos determinados tipos de cáncer.

9. Beneficioso contra el Alzheimer.

Un prestigioso estudio científico en ratones demostró que el aceite de oliva virgen extra posee compuestos capaces de eliminar las placas beta-amiloides de las neuronas que es lo que provoca dicha enfermedad neuro-degenerativa.

10. Alimento esencial en cualquier dieta.

El aceite de oliva virgen extra posee unas características enormemente saludables para formar parte de cualquier tipo de dieta para perder peso ya que según cuentan los expertos en nutrición el consumo de grasas saludables como son los ácidos grasos monoinsaturados del aceite de oliva ayudan a acelerar el metabolismo y es más eficaz que determinadas dietas basadas en el consumo de dieta bajas en grasa.

11. Protege el sistema inmunológico.

El aceite de oliva virgen extra con sus características antioxidantes es capaz de proteger nuestro sistema inmunológico fortaleciéndolo frente a los ataques de agentes externos (virus y bacterias) previniendo numerosas infecciones y enfermedades.

12. Aliado contra las enfermedades del corazón.

El aceite de oliva virgen extra o AOVE posee compuestos que protegen a nuestro corazón de enfermedades cardíacas como la arteriosclerosis (placa en las arterias) provocada por el estrés oxidativo de las lipo-proteinas de baja densidad o LDL (el mal llamado “colesterol malo”). El aceite de oliva posee numerosos antioxidantes que previenen la inflamación que provoca dicha enfermedad cardíaca, además también mejora en general la fortaleza del sistema circulatorio.

13. Previene los efectos nocivos del colesterol LDL.

El aceite de oliva virgen extra posee un componente llamado fitoesteroles que producen un aumento del colesterol HDL (el llamado “colesterol bueno”) en nuestro organismo lo cual es enormemente beneficioso para conseguir un equilibrio entre el “colesterol bueno” o HDL y el “colesterol malo” o LDL. Este equilibrio es enormemente beneficioso para nuestra salud cardio-vascular previniendo enfermedades de todo tipo como las expresadas en el punto anterior.